Críticas de cine: Camino 9/10

Javier Fesser que nos tenía acostumbrados a comedias de lo más delirantes se pasa esta vez al drama más desgarrador y nos demuestra que quien ama el cine no distingue de géneros y nos deja sin duda una de las películas del año.
Mucho se ha hablado ya de "Camino", bien pues todo lo que hayáis oído es poco.
Increíble, brutal, desgarradora, tristísima y perfectamente realizada. No voy a contar el argumento porque a estas alturas todo el mundo lo conoce.
Fesser realiza uno de sus mejores trabajos con este drama. Un retrato claro y directo del Opus Dei en España. Horripilante y a la vez valiente. Me imagino que los opusinos se estarán rasgando las vestiduras.
Fesser nos presenta La Obra, eufemismo de secta, como es en realidad, medieval, manipuladora, absurda, absorbente, ridícula, pero sobretodo horrible. Encierran a sus "hermanos" en un mundo ajeno a la realidad, les recluyen, les separan de sus familias, les sacan el dinero, les comen el cerebro con cuchillo y tenedor todo en nombre de las pamplinas más absurdas que uno se pueda imaginar.
En la cinta es la madre la encarnación de esta abominación, una madre que renuncia a sus hijos, uno detrás de otro, en nombre de Dios y de la Orden, y que llega a hacer cosas espeluznantes para ello, frente a un padre agnóstico que se siente impotente y perdido y que no se ve capaz de luchar contra ello y contra toda la comunidad de opusinos que les rodea.
Mención a parte para Nerea Camacho, Camino, que nos regala una actuación increíble y sorprendente.
Pero Fesser no deja a un lado el mundo de fantasía e imaginación al que nos tenía acostumbrados sino que aqui lo refleja en los sueños y pesadillas de Camino que alimentan y complementan la película a la perfección.
La cinta es una profunda reflexión sobre el amor y la muerte, que caminan de la mano todo el metraje. Al final no sabemos qué es más importante si la enfermedad de la niña o su primer amor.
En resumen una película bellísima y espeluznante a la vez, que te hará estremecer en cada fotograma.

Inspirada en la historia real de Alexia Gonzalez Barrios.