Hace unos meses o quizá ya un año, el trailer de una cinta de animación llamó poderosamente mi atención, con un dibujo mágico y preciosista prometía ser uno de los estrenos animados del año. Cúal fue mi sorpresa al descubrir que la cinta en concreto provenía de aquí mismo, de España, no me lo podía creer, eso si que era una noticia y no el sobrepublicitado estreno de la cinta de temática trilladísima de "El Orfanato". El caso es que entre unas cosas y otras no tuve ocasión de verla en pantalla grande y después de perseguirla varios meses me hice con ella hace un par de semanas. Y realmente no me defraudó. El dibujo es maravilloso, original y mágico, con unos tonos semicálidos que recrean perfectamente el ambiente que se pretende dar al film. Un argumento sencillo pero original que te transporta a un mundo onírico que cobra vida propia. Por no hablar de los personajes, a destacar los bichillos que habitan las farolas, geniales, quizá el más flojo sea el mismo protagonistaun poquito cabezón y sin cuello, un poco extraño para ser un niño.
Pero sin duda lo que más me ilusionó de esta propuesta fue su fuerte personalidad, una película que no copia éxitos estadounidenses y que se pasa por el forro el patético sentimiento de inferioridad que parece tener la animación española frente al resto del mundo.
En resumen un gran trabajo por parte de todo el equipo que ilusiona y esperanza. Y que demuestra que no todo el dinero que se invierte en el cine en España acaba convertido en basura.
Si quieren que llenemos las salas de para ver cine patrio tendrán que hacer el mismo esfuerzo que han hecho con "Nocturna". Sus directores a los que habrá que seguir muy de cerca son Adriá García y Víctor Maldonado. La cinta se llevó el Goya a mejor película de animación de 2007, aunque no es que eso tenga muco merito, no se si quiera si se presentó alguna candidatura más...
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